En China el consumo de carnes, en los últimos 30 años, aumentó a una tasa de 1,4 kg per capita por año, lo que arroja un total de 1.800.000 tn de carne más por año. Esto, a la vez, requiere de 6.300.000 tn de granos por año de alimento adicional. “Hoy –comienza el Ing. Agr. Vilella- los chinos consumen 78 millones de toneladas de carne y necesitan 273 millones de tn de granos. En 2016 el aumento adicional será de 30 millones de tn de alimentos balanceados, 20 de maíz (una cosecha argentina) y 10 de concentrados proteicos de soja por sobre lo actual”.

De estos números, sumados a la demanda de los otros países de Oriente y Europa -nuestro principal destino de productos tanto pampeanos como extrapampeanos o de alta gama- se desprende la pregunta: ¿quiénes están en condiciones de satisfacer estas fuertes demandas? “La situación de los principales demandantes está muy comprometida ya que tanto el Sudoeste asiático como Europa están usando al máximo sus recursos suelo y agua –explica-. Adicionalmente, en muchos casos, la cuestión ambiental reduce aún más sus posibilidades. Por ejemplo: Europa importa del 50 a 75 por ciento del agua virtual que consume y le es muy difícil aumentar la estabulación de ganados. La perspectiva, entonces, es que dependerán de terceros para satisfacer sus necesidades”.

Desde el punto de vista de los países agroexportadores, en un contexto en el que China y Corea se están posicionando como compradores de centenares de miles de hectáreas en África a fin de asegurase la provisión de alimentos, son pocos los que reúnen los requisitos suficientes como para sostener la demanda alimenticia a nivel global. Según el director del Programa de Agronegocios y docente de la Facultad, la Argentina cuenta con una excelente base para posicionarse en vistas al 2020: una dotación de tierra agrícola per capita solo superada por cuatro países, agua abundante en el tercio húmedo del país, producciones de calidad en diversas zonas, productores capacitados y buen acceso a las tecnologías.

En cuanto a las posibilidades de nuestro país “solo deberían resolverse las reglas de juego”, advierte Vilella quien, además, explica que todavía hay mucho trabajo por hacer: “La cuenca de Plata tiene el 84% del total de agua en superficie argentina. Se vierte por día al mar el equivalente a 260 litros por habitante del mundo (6.500 millones), y no hay en toda la cuenca una sola obra de infraestructura para aprovechar productivamente un solo litro. Las previsiones indican que por el cambio climático esta zona será más húmeda y las más secas serán aún más secas; esto hará, por ejemplo, que en Cuyo deban cambiarse los sistemas de riego por manto por riego presurizado”.

En una charla titulada Oportunidades agroindustriales para el 2020, el Ing. Agr. Fernando Vilella ofrecerá más precisiones acerca de estas cuestiones claves para el desarrollo de un plan agropecuario que posicione a la Argentina como uno de los proveedores de alimentos más importantes a nivel global. Será en el marco de Expo UBA, el próximo 2 de octubre a las 20 horas en el auditorio 2 de La Rural. La inscripción debe realizarse a través del siguiente link: http://www.uba.ar/expouba/organizador.php?o=6

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