DESARROLLAN UN CHIP PARA LA TRAZABILIDAD Y EL MEJORAMIENTO GENÉTICO |
|
|
|
|

|
El dispositivo fue presentado por un grupo de investigadores de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (FAUBA), el Instituto de Genética Veterinaria de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y el CONICET.
El chip contiene un conjunto de marcadores moleculares, entre un grupo de 640.000, para bovinos de las razas Brangus, Braford y Brahman, que permitirá a los criadores incorporar información genómica a la selección de reproductores, para mejorar los rodeos en menos tiempo y a un menor costo, respecto de los valores internacionales.
Esta nueva herramienta se denominó ArBos1 y obtuvo el premio en la categoría “Investigación Aplicada” en la edición de este año del Concurso Nacional de Innovaciones (Innovar).
Desde la FAUBA explicaron que se trata de un desarrollo único en la Argentina por el cual, “a partir de ahora, los productores ganaderos podrán acceder en el país a un servicio de genómica que debían realizar en el exterior y, con ello, agregar información genómica al pedigree y a los caracteres fenotípicos (características de medición directa en los animales, como pesos y mediciones de res por ultrasonido)”.
El investigador de Agronomía de la UBA, Rodolfo Cantet, recordó que “hasta la actualidad existía un chip con características similares, desarrollado por la empresa Illumina, que fue concebido para ser muy informativo para las razas Angus y Holando”.
Sin embargo, aclaró que “ese chip perdía calidad de información (todos los animales de esa raza son iguales para ese marcador) al aplicarlo a las razas Brahman, Brangus o Bradford, que son importante por su difusión en la Argentina”, indicó.
LOGRO
Los desarrolladores obtuvieron una placa más económica, con tecnología de la empresa Affymetrix, para razas compuestas británico/índicas, y le introdujeron marcadores que indican algunas enfermedades hereditarias, como coloración del pelaje y largo del prepucio.
El chip desarrollado por la FAUBA y la UNLP permite diagnosticar enfermedades de origen genético y realizar ensayos de paternidad y estudios de linajes.
Cantet señaló que una de las aplicaciones más importantes es la selección y agregó que “también permite hacer una verificación de paternidad o la trazabilidad del animal. Por ejemplo, al exportar carne a China podrías certificar que ese producto viene de la Argentina y saber cuáles son los padres”, comentó el académico.
CÓMO FUNCIONA
Para utilizar el ArBos1, el criador debe enviar al laboratorio una muestra de semen, sangre o pelos del toro, donde se encuentra el material genético. Allí se realiza un ensayo con la tecnología desarrollada por la FAUBA y la UNLP para obtener el perfil genómico del animal, que luego podría ser incorporado junto a los datos fenotípicos para utilizar en la selección y el mejoramiento de los animales reproductores. La meta es poder predecir estos datos en el animal que aún no nació.
“En la lechería, por ejemplo, la prueba de progenie requeriría analizar un número de terneros machos y esperar siete años hasta que las hijas de esos toros produzcan leche. Con la primera lactación de las hijas se obtenía la primera evaluación genética. Hoy podemos calcular la relación de parentesco usando padres y abuelos”, detalla el desarrollador.
Sin embargo, aclara que “estamos trabajando para, en el futuro, lograr esa predicción con la información de contemporáneos u otros ancestros”. Esto significa que con una ecuación predictiva se ganarían entre cinco y siete años de trabajo.
Cabe señalar, además, que los anteriores sistemas tenían un costo de entre U$S 75 y $ 80 y el ArBos 1 apenas llega a los U$S 40 por animal. |
|
 |
|
|
|
|