Información clasificada por www.sintesisagraria.com
  Gacetillas FAUBA La FAUBA en los medios Archivo  
Hay peces que comen las larvas de los mosquitos que transmiten el dengue  
La Gaceta- 10-01-2023 -
  Nota publicada por: La Gaceta el 10-01-2023

Nota de origen:
Multiplican la lucha contra el dengue con peces nativos
Enviada por: FAUBA , el 21-10-2022

Esta noticia ha sido difundida por las siguientes agencias:
Proyección Agroindustrial - Infocampo - Tiempo Argentino - Vet Comunicaciones - Tiempo Rojas - La Trocha Digital - Francisco Sellart - Mundo Rural Web - Síntesis Agraria - El Debate - Eco Portal - Intramed - El Once Digital - FM Mix - Perfil - Neo Mundo - MSN Noticias - Reporte 24 - Glaciar FM - Headtopics - TVN - La Brújula SJ - FM Signo - Primero Córdoba - Impacto Misiones - Infobae - Mnews - Noticias de Bariloche - El Noticiero Digital - Radio Más - Radio Cordial - LU 5 AM - Agro Rural Noticias - Agro Campana - AgroSyn - El Ancasti - Novedades del Sur - Sin Mordaza - GBN Argentina - Reporte Latinoamerica - Consenso Salud - Chubut Política - Doc Salud - El Caudillo Online - Tucumán 24 - Droguería Sur - Pura Data - Agendar - Revista Baqueano -

Consulte esta noticia en el sitio que fue publicada

La época de calor en la región también puede ser sinónimo de la llegada del dengue, la infección que transmite el mosquito Aedes aegypti. Ahora, investigadores de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires comenzaron a utilizar, a partir de una novedosa investigación, peces nativos en reservorios de agua para que se alimenten de las larvas del Aedes aegypti y así eliminar sin uso de químicos el vector transmisor de la enfermedad.

Se trata de la solución más natural posible ante la reproducción masiva del mosquito en estos meses, ya que evita la utilización de insecticidas, que incluso no siempre son 100% efectivos. Los peces seleccionados, los Cnesterodon Decemmaculatus (conocidos popularmente como madrecitas de agua), son autóctonos, de modo que se colabora también en la preservación del ecosistema.

“Se trata de un proyecto de extensión universitaria, en el que esta Facultad transmite el conocimiento adquirido sobre cómo es la cría, la siembra y el manejo de peces para control biológico a otras instituciones. En este caso lo hacemos con un polo educativo, que es de donde provino la primera demanda, ya que tienen huertas con tanques de riego y demás reservorios de agua”, cuenta Alejandro Koko López, docente de la cátedra de Acuicultura de la Fauba, en un comunicado de prensa difundido por el Departamento de Comunicación de la UBA.

En cuanto a la efectividad de las madrecitas de agua a la hora de terminar con las larvas, López es contundente. “Tenemos la certeza de que, en el reservorio de agua en el que colocamos estos peces, no sobrevive ninguna larva de mosquito. Eso está confirmado”.

Y agrega otros beneficios: “No hay que darles alimentación suplementaria, comen simplemente lo que hay en el lugar, y su población se amplía solo en caso de que tengan mayores recursos alimenticios”.

Es decir que las madrecitas de agua, cuyo tamaño máximo es de entre 2,5 y 3 centímetros, aseguran, con su presencia, la ausencia total de larvas para siempre. Ya que, a no ser que el lugar se quede sin agua, los peces se reproducirán en forma permanente y natural, sin necesidad de intervención humana.

La entrega de los peces para el control de mosquitos es totalmente gratuita, ya que el programa está financiado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación. Para solicitarlos se puede escribir a [email protected] “A partir de que recibimos el pedido, se estudia el caso en particular, se hace un diagnóstico y se analiza qué tipo de siembra es la ideal. Es una provisión a demanda”, comenta el docente.
Una epidemia latente

La problemática de las enfermedades transmitidas por el Aedes aegypti no es menor. Según el Ministerio de Salud de la Nación, solo en el caso del dengue, se pasó de unos 40.000 casos en 2016 a casi 60.000 contagiados en 2020, teniendo en cuenta la particularidad de dicho año, con la aparición en escena de la covid/19 y las posteriores cuarentenas. Es por ello que se especula con que el escenario podría haber sido incluso peor si no había restricciones en la circulación personal por el territorio nacional.

Parte del crecimiento de estos casos podría explicarse por una mayor resistencia del mosquito a las temperaturas bajas. Según un estudio científico, el Aedes aegypti adquirió una gran capacidad adaptativa a los cambios del clima, lo que explicaría la mayor expansión territorial de este insecto en la Argentina, sobre todo hacia zonas más frescas y frías donde antes no se los detectaba.

Sylvia Fischer, integrante del Grupo de Estudio de Mosquitos (GEM) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA, explica que esta adaptación del mosquito se debió, principalmente, a la diapausa, algo así como una inhibición de los huevos para eclosionar durante los meses de invierno. Y luego retoman su reproducción y desarrollo con la llegada de los primeros días de calor. Y, cuando lo hacen, finalmente poseen mayor cantidad de lípidos, que son las grasas necesarias como reservorio de energía y que le permiten su nacimiento y veloz crecimiento, lo que lo lleva a ser una fuente de contagio del dengue más rápida que en otras décadas.

Otras adaptaciones que hizo el Aedes aegypti, en comparación con especies de otras partes del mundo, es que el autóctono completa su desarrollo a temperaturas más bajas que los demás, ya que puede hacerlo hasta a 12°C, unos tres o cuatro grados menos que otros mosquitos similares en el planeta, describe la investigadora. Y, agrega: “cuánto más frío es su origen, mayor es su desarrollo”.