Un estudio de la FAUBA mostró que este método no
reduce la cantidad de malezas, pero sí cambia cuáles aparecen. La
práctica gana espacio entre productores, aunque especialistas advierten
que no alcanza por sí sola y que el desafío es avanzar hacia un manejo
integrado.
La Red de Manejo de Plagas de Aapresid (REM)
presentó un mapa sobre la situación actual; el problema se incrementa y
ya son 34 las especies con resistencia